sábado, 26 de diciembre de 2020

DE MACBETH

En el Teatro María Guerrero podemos ver una obra de Shakespeare, una de sus obras más representativas, "Macbeth".

Quisiera que esta entrada sirviera de homenaje a Gerardo Vera, que desgraciadamente nos dejó. Este fue su último trabajo, y sólo puedo decir que es maravilloso el montaje. Juega con todos los elementos: con la luz, la música, la escenografía, y lo hace de manera maravillosa. Por supuesto, la mano de Alfredo Sanzol, que es quién ha levantado del todo el proyecto, se nota y bien, pero ha respetado y cuidado el trabajo de Gerardo Vera.

Hablar de Macbeth es hacerlo de ambición, egoísmo, traiciones, odio, profecías, miedo... y muerte. Poner todo en pie, sobre un escenario, es complicado porque mantener una tensión continua, como exige la obra, depende de muchos factores.

El primero ya está dicho, el montaje es perfecto. La adaptación de José Luis Collado, es otro, y que Alfredo Sanzol sabe conjuntar todo, es un hecho.

Si hablamos de las interpretaciones, no diré nada nuevo sí digo que Carlos Hipólito está maravilloso. Para él, actuar es como caminar, le sale de forma natural y aparentemente sin esfuerzo. Pocos actores he visto capaces de hacerlo.

Marta Poveda interpreta, de forma muy solvente y perfecta, a la mujer más malvada de Shakespeare, lady Macbeth. Mantenerse a la misma altura que Carlos Hipólito es difícil, y ella lo consigue.

El resto de los actores y actrices:  Jorge Kent, Agus Ruiz, Álvaro Quintana, Borja Luna, Chema Ruiz, Fran Leal, Markos Marín, Mapi Sagaseta, Alejandro Chaparro y Fernando Sainz de la Maza, están a la altura, bueno más que a la altura. 

Nos encontramos con un montaje completo. Si la obra te hace pensar cuando la lees, cuando la ves en el María Guerrero la vives.

Estará hasta el 17 de enero, regalenselo por Navidad, o porque quieren, pero háganlo.

LA CULTURA ES SEGURA


viernes, 11 de diciembre de 2020

DE LIVIA CRUZ MONTES

 

Hablar de mi entrevistada es hacerlo de teatro en su más estricta pureza. ¿Por qué? la contestación es sencilla.

¿Cómo no considerar teatro a Livia Cruz Montes cuando en su curriculum encontramos que es fundadora de la Compañía de Teatro Media Luna, que escribe, dirige, enseña y además como pedagoga, para ayudar a los intérpretes, crea un método llamado “Teatro Vital”?

Tristemente tengo que decir que nunca he visto a Livia sobre el escenario, y ganas no me faltan, pero cuando te encuentras a quién ama de esta forma este mundo, y hace tanto por él, necesitas conocerla más en profundidad, porque te ayuda a entender lo maravilloso que es el mundo artístico.

Muchas gracias Livia por contestar mis preguntas

Foto cedida por Livia

. La primera pregunta siempre es la misma, pero nos hace conocer mejor a quién contesta las preguntas ¿Desde cuándo tenía usted el gusanillo de la interpretación?

 Desde muy pequeñita. Cuando tenía dos años mis padres me llevaron al teatro Lope de Vega de Sevilla a ver una obra “Liebre, libre, libra, libro” de Julio Martínez Velasco.  Me quedé  con la boca abierta durante toda la función.

. ¿Cuándo decidió dar el paso profesional?

Siempre lo tuve claro y en cuanto terminé la selectividad me matriculé para hacer las pruebas de acceso a la Escuela de Arte Dramático de Sevilla (ESAS) … Además de matricularme en la carrera de Historia ( que no era más que una tapadera)

. En su familia no había antecedentes artísticos ¿Qué tal se lo tomaron?

Pues hubo disparidad de opiniones…y cuando decidí irme a Madrid a seguir estudiando se levantaron algunas ampollas. Lo bueno de todo es que, al final, el tiempo pone las cosas en su sitio.

Me matricule en el “Laboratorio de Teatro de William Layton” por las mañanas y por la tarde iba a “La Escuela La Barraca. Teatro Popular” dirigida por Alicia Hermida y Jaime Losada a los que considero mis Maestros. Me hice la formación en ambas escuelas.

. Admiro, y mucho, a los actores y actrices todo terreno, como es su caso, capaz de interpretar, ¿cómo se logra alcanzarlo todo?

En este camino nunca se logra alcanzar todo. Es un sendero de búsqueda constante. Se requiere mucha constancia, esfuerzo, curiosidad, ilusión y una gran dosis de fortaleza, pues hay muchos períodos de intermitencia, momentos de frustración…para llevar  bien esta profesión es importante “el sentido del humor”

. Y lo que es más difícil ¿Cómo se consigue hacerlo todo bien?

Soy muy perfeccionista y nunca me quedo satisfecha, así que echo muchas horas preparándome  para cualquier cosa que hago. Sin embargo he aprendido a reírme de mi neurosis. El trabajo de meditación, que hago con mi maestra Lama Tashi Lhamo desde hace veinticinco años, y el trabajo con el cuerpo, que hago junto a mis maestros Patricia Martello y Marcelo Di Matteo, creadores del método Vital Development, me ha ayudado mucho a abrir un espacio de empatía hacia mí misma y hacia los demás.

. En muchas ocasiones las actrices se quejan, y con razón, de que hay menos papeles interesantes para ellas que para los actores ¿usted lo ha notado así o cree que afortunadamente la cosa va cambiando?

Sí que lo he notado, no sólo como actriz sino como directora también. Muchas actrices nos hemos tenido que producir para interpretar papeles interesantes que no sean de mujer objeto o florero. También a partir de una edad tenemos menos posibilidades de tener un buen papel a no ser que des el paso a producirte. Resumiendo hay discriminación por género y por edad.

Aunque se están empezando a dar cambios dentro de la dramaturgia actual que quizás posibiliten ese paso hacia la igualdad de trabajo.

. De todas las obras que ha interpretado, de todos los directores con los que ha trabajado ¿recuerda alguna de forma especial?  

“El retablillo de don Cristobal” de Federico García Lorca que dirigían Alicia Hermida y Jaime Losada y actuaba con ellos. Fue una experiencia preciosa que jamás olvidaré.

Otra obra maravillosa con la que estoy actualmente en cartel es “Entre Mujeres” de Bego Isbert y Sara Marín. Una comedia muy divertida de mujeres fuertes que deciden comenzar a vivir sus propias vidas y sus sueños.

 . ¿Repetiría con alguno sin dudarlo?

Por supuesto, repetiría con todos, sin pensarlo.

. Usted es pedagoga teatral ¿qué diferencias encuentra en los jóvenes, a los que forma, con usted cuando comenzó en este mundo?

Por un lado, la gente que empieza ahora tiene acceso a una formación más completa. En las escuelas tratan de ofertar más asignaturas para forman a actores que sepan hacer de todo. Pero, por lo general, lo que me he encontrado como docente es que quieren obtener resultados rápido y con poco esfuerzo. Les cuesta tener una disciplina; se desaniman con facilidad al no encontrar. La búsqueda es una parte esencial y se aprende a base de hacer y equivocarse, así vas encontrando.  La falta de indagación y profundización hace que la mayoría de las veces el estudio de texto y de personaje  se quede en la superficie, por lo tanto las emociones tampoco surgen ni fluyen con facilidad.

He detectado que se carece de una base cultural sólida que genera obstáculos en la expresión de  las emociones y los sentimientos.

Foto cedida por Livia
. ¿Piensa que actualmente lo tienen más fácil, que tienen más oportunidades?

Actualmente no lo tienen, ni lo tenemos nada fácil. No hay una política de ayuda a las Artes en general. Los políticos hablan mucho, pero las ayudas no llegan y el sector cultural está realmente tocado por la pandemia, aunque antes ya lo estaba.

. Precisamente, su experiencia como pedagoga, y me atrevo añadir como actriz, le ha hecho crear un método para ayudar a los actores a interpretar personajes, se llama “Teatro Vital” ¿podría explicarnos en qué consiste?

Claro que sí, pero antes, quisiera agradecer de corazón tanto a Lama Tashi Lhamo como a Patricia Martello y Marcelo Di Matteo, el haber sido fuente de inspiración para crear esta forma de trabajo. 

El Teatro Vital es un método de trabajo, en el que a través de conectar con los arquetipos del inconsciente colectivo, afinamos el cuerpo, emociones y sensaciones. Esto ayuda al actor a conocer, sentir y conectar con la energía arquetípica que le facilita la construcción de diferentes personajes desde el ángulo del inconsciente colectivo. Una vez que el actor experimenta sensorial y emocionalmente los ejercicios que trabajan los arquetipos, tendrá la capacidad de conectar con ellos para crear el personaje, al tiempo que aflora en él un movimiento emocional que le hace penetrar en lo más hondo del personaje. Este movimiento aporta imágenes, viveza y textura sutiles que ayuda al actor a transformarse en el personaje teatral.

 Para llevar a cabo estos ejercicios utilizamos músicas específicas que nos transportan y movilizan las energías diferentes.

. Desde que tengo uso de razón, siempre he oído “el teatro está en crisis" pero yo siempre lo he sentido muy vivo. ¿Qué le diría a los espectadores, que no acuden al teatro, para animarlos a formar parte de él? Para que conocieran este mundo

La cultura, desde mi punto de vista, es la que está en crisis en cualquiera de sus ramas.

Yo diría que  lo esencial sería fomentar la cultura desde pequeños, tanto en los colegios como en las familias, pues los niños aprenden lo que ven; cuanta más cultura reciban más sensibilidad adquirirán.  ¡Qué mejor bien que despertarles la imaginación y la empatía hacia los seres mediante la música, la escritura, la danza, la pintura y el teatro…!

El año pasado  Peter Brook en una entrevista en El País Semanal dijo:

“No estamos aquí para cambiar el mundo, pero conmover a alguien con una historia ajena es un trabajo que merece la pena”

. Aunque no tiene nada que ver con el teatro, mi otra pasión son los animales y me consta que para usted son también especiales. Viene la Navidad, ¿qué le diría a todos los que van adquirir uno para que entiendan que son parte de la familia y no se deben abandonar?

Una mascota forma parte de la familia y es una responsabilidad  que vas a  adquirir durante 12 o 13 años de la vida de este “ser” tan especial que te dará lo mejor de sí mismo y aprenderá de ti. Tú serás su mentor y tendrás que hacerte cargo de todas sus necesidades básicas: educación, salud, juego y amor.

Por supuesto, antes de comprar, ¡adopta! Hay muchos perros y gatos de todo tipo de razas y colores en las protectoras de animales que buscan el calor de un hogar. El amor de estos perros es completamente incondicional. Yo colaboro con varias protectoras de animales entre ellas está Dog Horse City de Toledo con los que tengo el placer de trabajar con dos de sus perros más conocidos y equilibrados. Están trabajando conmigo como actores en la obra “La Receta de la Fabada”. Ambos perros considerados PPP (Perros Potencialmente Peligrosos) habían sido rescatados y uno de ellos rehabilitado.

Aquí os dejo su web por si queréis ayudar o colaborar: https://www.doghorsecity.org/

¡Pon un animal en tu vida, pero siempre con consciencia y empatía!

Muchas gracias, si quiere añadir algo más estaremos encantados

Por si queréis estar más informados de lo que haga, esta es mi página web donde voy colgando lo que voy haciendo. https://www.liviacruzmontes.com/

Ha sido muy amable, y recuerden todos dos cosas: la primera que Livia está de gira con “Entre Mujeres” y que yo no me la perdería porque la diversión y el buen teatro está asegurado. La segunda, y  no me cansaré de decirlo EL TEATRO ES SEGURO, LA CULTURA ES SEGURA


sábado, 28 de noviembre de 2020

DE NUEVO ANTOINE

Antes de que todo empezase, antes de que el Covid formara parte de nuestras vidas, vi el preestreno de Antoine. Al poco, todos los teatros cerraron, su soledad, fue la de todos.

Pero, afortunadamente, los teatros comienzan a tener de nuevo espectadores, a llenarse de vida, porque hoy, dentro del aforo permitido, estaba a tope. Hoy he visto, de nuevo, Antoine. 

Es valiente quién se arriesga sin saber lo que puedes conseguir, y quiénes forman parte de este espectáculo, lo son y mucho. Pero cuando tienes un proyecto de esta calidad en las manos, debes hacerlo. 

Escribí mi crítica en febrero, en su primera actuación y os invito a leerla http://belui1972.blogspot.com/2020/03/el-29-de-febrero-las-20-horas-se-ha.html?m=1

Pero, permítanme añadir, que en esta Navidad donde nada será como siempre, es más necesario que nunca ser el niño que fuimos, y mirar con sus ojos lo que tenemos a nuestro alrededor, y aprender a verlo de nuevo.

Antoine con su música, con la dirección de Ignasi Vidal, con la actuación de todo el elenco, nos permite soñar, nos da permiso para sentirnos, para entender a los niños que fuimos y disfrutar, ya de adultos, como nunca debimos dejar de hacerlo.

Os invito a verla hasta el 13 de diciembre en el teatro Cofidis y a partir del 19 de diciembre hasta el 10 de enero en en el teatro EDP Gran Vía

Antoine nos acompañará todas las Navidades, es un regalo que nos debemos hacer.

EL TEATRO ES SEGURO que no se les olvide jamás.

sábado, 24 de octubre de 2020

DE JAIME PUJOL

 

Continuamos con las entrevistas, y tengo la inmensa suerte de tener las respuestas de un magnifico actor, director y dramaturgo (no me negarán que es un curriculum espectacular) que me maravilla desde hace tiempo, y que me ha mostrado tanta amabilidad y cariño, que mi admiración es aún mayor. Estoy hablando de Jaime Pujol.

Como ya saben, siempre cuento mi primer recuerdo del entrevistado. A Jaime Pujol, lo vi por primera vez en la serie "Hospital" de Antena 3 en el año 1996, posteriormente en "Hermanas" interpretando a un joven médico descreído en el año 1998. Será, en ese mismo año, cuando se pone en la piel del personaje que más popularidad le ha franqueado: Andrés Casqueiro de "El Comisario", y, aquí, he de hacer una confesión (tengo testigos que no me dejarán mentir) desde el principio fue mi personaje favorito, y al día de hoy, me hago algún maratón televisivo con la serie y sigo pasándomelo igual de bien. Por supuesto, no me puedo olvidar de su Adolfo Suarez en el "Ministerio del Tiempo" o de padre de un ángel en "Ángel o Demonio" y permítanme que les anime, a ver la reciente "Mujeres del Hampa 2" se lo pasarán bien y emocionaran de igual manera.

Pero, sinceramente, cuanto más disfruto de la interpretación de Jaime Pujol es cuando se pone en la piel de un malvado como, por ejemplo, Martín Ángulo en "Amar es para siempre". No se por qué, quizás porque su aspecto no nos lleva a pensar que puede ser una mala persona, y cuando más alejado ves al intérprete de sus personajes, más lo disfrutas, porque puedes sentir su complejidad.

Me entristece decir que nunca lo he podido ver sobre un escenario. Pero sobre el año 2013, en el Matadero, pude ver una obra llamada "Continuidad en los parques" con la que disfruté mucho. Cuando leí quién era el autor, Jaime Pujol, lo primero que pensé fue que, curiosamente, se llamaba como el actor. Pero mi afán de conocimiento teatral me hizo investigar y, fue cuando, realmente conocí otra faceta: la de dramaturgo, y a mi me encanta leer teatro, así que...se convirtió en un buen compañero en los momentos de lectura.

Pero no quiero hacerles esperar más, así que comenzaremos con las entrevista, agradeciendo en primer lugar que haya podido contestarme, ya que se la enorme cantidad de trabajo que tiene.

P: La primera pregunta suele ser siempre la misma pero es que, pienso, es obligada ¿Cómo y por qué se decidió a hacer de este mundo su forma de vida?

R: Pues la verdad, no entraba en mis planes. Cuando tenía 16 años yo tenía, más o menos decidido que quería ser arquitecto, pero ocurrió algo curioso. A mí, gracias a mi profesora de literatura, me fascinaba leer teatro. Y a los 17 años hubo que recaudar fondos para un viaje de estudios y, como yo era muy insolente en esa época, muy atrevido, me dije: ya que has leído tanto teatro y te gusta tanto ¿por qué no escribo una obra?. Entonces lié a un amigo mío y juntos la escribimos. Luego dimos el paso siguiente, la representamos en el instituto con el fin de recaudar dinero para ese viaje de estudios. Y de alguna manera se puede decir que el veneno del teatro entró en mí y ya he sido incapaz de bajarme del escenario. Hice de ello mi forma de vida, mi profesión y de las cosas que más amo en este mundo.

Foto de la página web oficial de Jaime Pujol

P: Los comienzos suelen ser difíciles, supongo que hubo cosas muy complicadas y otras más sencillas ¿qué es lo más difícil que se encontró en los primeros pasos?

R: En el periodo en que arranqué en esta profesión, que eran los años 80, no existían tantas opciones como ahora y menos en el mundo audiovisual. Yo orienté mi carrera básicamente hacia el teatro que era lo que tenía más próximo y más cercano. En mis principios, la verdad es que fue todo bastante rodado. Yo arranqué con una obra de teatro que dirigió mi profesor de interpretación, Antonio Díaz Zamora, “Flor de Otoño” Luego tuve la suerte de entrar en la Compañía de la Fundación Shakespeare… pero quizás, también, tuve la suerte de hacer mis primeros pinitos en el audiovisual, algún episódico en alguna serie en Barcelona, alguna cosa en Madrid. Quizás lo que más me sorprendió, o más bien, fue lo más dificultoso, era el hecho de tener que esperar a que te ofrecieran trabajo. Esa era una opción, que en un principio, a mi me desesperaba, sobre todo porque después de una buena temporada de trabajo me encontré un año entero sin trabajar. Pero desde muy temprano, decidí, que lo que no debía hacer era esperar que me llamaran, Y como yo, también, toco otros palos dentro de esta profesión, porque como ya sabes escribo y dirijo, cuando no había opción o cuando no me llamaban para algo, era yo el que generaba proyectos o ponía en marcha alguna obra. De hecho, nada más acabar “Flor de Otoño” el siguiente montaje fue creación propia con unos compañeros actores, con la que montamos una compañía, que aun existe “Pavana Producciones” Aquí hicimos un trabajo coral que se llamaba “Supongamos que no he dicho nada” Todo esto me demostró que si uno quiere, con persistencia, trabajo y mucha lucha, se consigue

P: Siendo usted un actor que ha participado en muchas series ¿Piensa que los actores o actrices que comienzan actualmente, lo tienen más fácil que ustedes con todas las plataformas de televisión y series que se hacen en la actualidad?

R: Si, es cierto que existe muchísimo más mercado, muchísima más posibilidades que en la época en la que yo comencé. La televisión, sobre todo en lo referente a la ficción española, estaba empezando y era mucho más difícil. Quizás, los actores que estudiábamos en aquella época arte dramático orientábamos nuestra carrera o pensábamos más en el Teatro. Hoy por hoy, es al contrario, la gente que entra en una escuela lo hace, casi, con la finalidad de orientar su carrera hacia el cine o la televisión, especialmente la televisión porque el cine también está limitándose mucho. Sí, yo creo que lo tienen bastante más fácil pero también, por otra parte, hay que decir que es una profesión que se ha convertido en multitudinaria. Hay mucha gente joven que apuesta por ella y, por lo tanto, también hay una competencia más dura, más feroz dentro de esta profesión y cuesta, la verdad es que es una profesión que cuesta. Pero yo siempre digo que es una carrera de fondo, que no hay que buscar el éxito de manera inmediata, que no hay que desesperar porque no surge el trabajo y que hay que ir despacio, sembrando y al final se recoge.

P: Su currículum es muy extenso. En el podemos ver que también dirige y en esta faceta ha sido igualmente premiado, por "Mercader Amante" con la que fue galardonado a la mejor dirección escénica, en la XIX edición de los Premis de les Arts Escèniques 2010 de la Generalitat Valenciana. Realmente en el teatro lo ha hecho prácticamente todo ¿Con que se quedaría? ¿Dónde disfruta más?

P: Siempre digo que eso es como si me dieras a elegir entre mis hijos o si me dieras elegir entre alguna de las obras que he escrito, quizás, por algún motivo te podría decir alguna. Pero, en general, lo que ocurre es que disfruto con cada rincón de esta profesión, disfruto en cada ámbito, con cada apartado. Me encanta dirigir, me encanta actuar y me encanta escribir y, de alguna manera, lo considero como vasos comunicantes. Es verdad que cada uno tiene una dinámica y una manera de hacer completamente distinta, pero siempre que escribo me nutro de mi experiencia como actor y director, siempre que dirijo me sirve todo el trabajo que he hecho de interpretación y siempre que actúo, tengo las referencias del trabajo que he visto de otros compañeros cuando los he dirigido. O incluso, el esquema dramatúrgico que utilizo cuando escribo, también, me sirve para componer un esquema de trabajo y afrontar el personaje desde el propio texto o desde el guión. Por lo tanto estoy absolutamente, enamorado de cualquiera de las cosas que tengan que ver con mi profesión. Si tuviera que elegir, porque me pusieras entre la espada y la pared, pues… sinceramente no me atrevería a decirlo, porque, de verdad,  que disfruto y encuentro cosas que me llenan de satisfacción con cada una de ellas.

P: ¿Qué texto dramático de todos a los que se ha enfrentado le ha influido más y por qué? Por supuesto incluyo los suyos

R: En mi carrera ha existido un texto dramático que me ha causado mucho impacto en lo personal y en lo emocional, e incluso en lo laboral. Yo creo que de alguna manera también, me hizo crecer como actor porque tuve la suerte de interpretarlo, y me descubrió un universo dramático y extraordinario como es el mundo de Shakespeare. Hablo de la obra Romeo y Julieta, donde tuve la suerte de interpretar al personaje de Mercucio. Realmente es un texto que me ha marcado. Yo creo que en Shakespeare está absolutamente todo, es un autor que nunca va a pasar de moda porque escribe sobre todos los temas de la sociedad.  En su propia esencia, la sociedad realmente no ha cambiado, así que cuándo vuelves a ver un texto de Shakespeare te das cuenta de que sigue vigente porque esos argumentos y esos temas, sobre los que escribe, continúan viviéndose en la actualidad.  También hubo un texto que tuve la suerte de dirigir en el grupo de la Universidad de derecho, “El desván” Es un texto de  Tom Stoppard, que es un autor británico que yo descubro y que me influye muchísimo como autor dramático. Realmente, digamos que se convierte, junto con Harold Pinter, en mi maestro dramatúrgico y que, sus coordenadas son las que me sirven a mí, realmente, para escribir mis propios textos. Tuve la suerte de dirigir una obra suya que se llama el “Verdadero inspector Hound”, qué es una comedia delirante y, bueno, absolutamente sorprendente

Foto de la página web oficial de Jaime Pujol
P: Hace ya muchos años, creo recordar que usted comentó en alguna ocasión que unos treinta años, que no se ha subido como actor a un escenario ¿Qué obra o personaje le haría cambiar de opinión?

R: Pues honestamente no lo sé porque he recibido ofertas de personajes absolutamente fascinantes, golosos y, la verdad es que, llevo tanto tiempo sin subir a un escenario, que no estoy ni siquiera tentado hacerlo. Entre otras cosas, porque mi trabajo como actor sigo desarrollándolo en el ámbito, aunque sé que no es lo mismo, de la televisión y el cine. Y mi vínculo con el teatro sigue estando latente todos los días de mi vida a través de la escritura y a través de la dirección.  Por lo que no es algo que en esencia eche de menos. Realmente es una decisión que he tomado y bueno, sería bastante complicado que volviera. Pero nunca hay que decir de este agua no beberé, y ese personaje que ahora mismo soy incapaz de imaginar algún día, de repente, aparece, me lo ponen delante y antes de dejar este mundo, me decido a volver.

P: Su trayectoria es impresionante en todas las facetas, pero siempre hay algo que se tiene en el horizonte, algo que sería el cenit, aquello que mayor ilusión hace. En su caso ¿Cuál sería?

R: Pues, mira, igual te sorprende esta respuesta pero algo que me haría mucha ilusión que ocurriera en un futuro, y ojalá sea lo más cercano posible, no tiene  que ver, estrictamente, con mi profesión,  aunque yo sí lo vínculo con la creación, y es que hace muchos años que me dedico también a crear formatos para televisión. Junto a un compañero, he desarrollado varios programas concursos, docushow,  también ficción, series… pues digamos, que una de las cosas que más me gustarían de este mundo, es poder ver alguno de esos programas que he ideado, que hemos ideado, que hemos creado, que hemos elaborado,  poder verlo en la televisión. Para mí sería, hoy por hoy, lo que más me llenaría de felicidad y de orgullo.

P: El teatro, ahora más que nunca, necesita de los espectadores ¿Qué les diría para animarles a acudir a los teatros?  y ¿para que se aventuren en él y aprendan a amarlo?

R: Bueno, realmente el que va al teatro sabe exactamente que se va a encontrar, que es algo absolutamente mágico, algo que no te puede dar ni el cine ni la televisión. Esa proximidad, la cercanía con el actor, ese vivir en directo el suceso, es algo absolutamente extraordinario. Y además saber que, cada día, esa función, a pesar de ser la misma, es distinta y el día que vayamos esos actores están haciendo la función para nosotros.  Hace muchísimos años, una de mis obras “Continuidad de los parques” que yo dirigí, tenía entre el elenco algunos compañeros míos del comisario: Joaquín Climent, Fernando Andina, Patxi Freytez , Víctor Clavijo también Darío Paso… a ese montaje, cierto día en el Talía, donde lo representábamos, un grupo de chavales jóvenes fueron a verla. Básicamente, lo hicieron porque querían ver a alguno de sus ídolos, creo que en ese caso concreto era Fernando Andina, pues fue muy emocionante como a la salida se acercaron todos a saludarle y la frase que decían es “nunca habíamos ido al teatro. Hemos venido para verte a ti y nos ha fascinado, nos ha encantado” De alguna manera se sentían motivados para volver. Yo creo que el teatro es un lugar mágico, y desde luego en la época en la que estamos viviendo, es un lugar completamente seguro, no habido ningún contagio procedente de ningún evento teatral. Así que lo mejor para esta época oscura es la luz del teatro

De nuevo le doy las gracias por haberme atendido con tanta amabilidad, ojalá que veamos muy pronto algunas de sus creaciones en televisión para poder disfrutarlas. Y si me permite, me gustaría acabar destacando dos notas que usted ha comentado: la primera la importancia de leer, pero sobre todo de leer teatro y la segunda y principal: hay que ir al teatro porque es seguro y porque es luz en una época oscura.

lunes, 12 de octubre de 2020

DE EDUARDO II, OJOS DE NIEBLA

He ido a ver en el teatro Bellas Artes, he de destacar la seguridad, "Eduardo II, ojos de niebla" La historia que se nos representa es la del Rey Eduardo II en Inglaterra en el siglo XIV, la obra es de Alfredo Cernuda, que se ha basado en una anterior de Christopher Marlowe.

El texto siempre es fundamental pero en este caso todo gira alrededor de él. La escenografía está creada para fortalecer la palabra, las luces, igual, e incluso las interpretaciones ayudan a que lo vivas.

¿Qué nos cuenta? De una forma contemporánea nos habla del respeto o no de la sexualidad de cada persona, pero sobre todo de amor y odio, de cómo por amor haríamos todo y como por odio (se separa por muy poco del amor) seriamos capaces de hacer más que todo. Está ambientada en el siglo XIV pero, todos, los que vemos la obra lo reconocemos porque el amor y el odio existirán, mientras los seres humanos sigamos en la tierra.

Jaime Azpilicueta es quién lo dirije, y como ya he dicho, todo lo pone al servicio del texto, para que esté llegue con la máxima pureza. Y, lo logra desde el principio al fin. 



Los intérpretes se conjuntan muy bien, todos nos hacen ver la maldad humana que se entremezcla con el amor, aunque éste no sea el que todo el mundo entiende. 

Pero me van a permitir, que sobre todos, destaque a dos porque sus interpretaciones me han llegado de forma más profunda

José Luis Gil está perfecto, lo da todo sobre el escenario, nos muestra a un Rey dispuesto a todo por amor, porque lo dejen vivir como él necesita para ser feliz. El esfuerzo que realiza se nota durante toda la obra. Hay escenas donde su intensidad es tan alta que puedes tocarla y sufrir lo que el rey está sufriendo.

Para terminar hablaré de Manuel Galiana, el que tuvo retuvo y guardo para la vejez. Con casi 80 años, hace que con sólo dos apariciones te quedes enamorada. Su personaje no es simpático, es un viejo judío prestamista pero lo construye con tanta ironia, sabedor de que es el que manda porque maneja el dinero, tan divertido que te lleva a su terreno fácilmente.


Al final José Luis, en nombre de todos ellos, nos dan las gracias por asistir, por ser sus héroes. No lo somos, sencillamente acudimos aquellos lugares donde sabemos que la seguridad es absoluta y el teatro lo es.


Hasta el 18 de e octubre la pueden ver, vayan y disfruten de un gran texto.

miércoles, 7 de octubre de 2020

DE SOLO QUIERO DINERO

Hoy he ido a celebrar los 10 años de las salas de Microteatro. Para quienes no sepan de lo que estoy hablando lo explico, aunque mejor, voy a dejar que sean ellos, así lo explican en su web "Obras de 15 minutos para 15 espectadores en salas de menos de 15 m2. Se representan simultáneamente y en sesión continua hasta 7 veces al día. Todas las obras giran en torno a un mismo eje temático que cambia cada mes (por dinero, por amor, por el futuro…)"

Pero no se asusten porque la seguridad es máxima. No más de 4 o 5 personas, te toman la temperatura, hidrogel y una pantalla de metacrilato que nos separan de los intérpretes ¿Quién puede dar más seguridad?

He visto "Sólo quiero dinero" tres intérpretes, 15 minutos y una vivencia impresionante. La intensidad con la que lo vives...si cuando vas al teatro tienes la sensación de que se actúa para ti, aquí tienes la certeza. 

He tenido la suerte de ver la primera función, el estreno, y sólo puedo decir que parecía más que rodada, lo que demuestra el gran trabajo y amor que director, actor y actrices han puesto en ella.

El tema es la prostitución, el descarnado y duro mundo que gira alrededor de ella. Y logra que las sientas en la piel. El texto de Richard Cliffor es muy bueno.

Pero un texto así, necesita que lo defiendan buenos escuderos y aquí, entra la dirección de Alberto Vázquez. Dirigir una obra que cuenta una historia dura, que tienes poco tiempo para conseguir la atención y, sobre todo, lograr la intensidad que la pieza requiere y hacerlo desde el minuto cero, es algo impresionante. El espacio lo permite, y la dirección logra que te sientas parte del mismo, incluso que seas un personaje más.

Los actores Pilar Coronado, Jesús Gallo y Liz Lobato están maravillosos, te envuelven desde el principio y emocionan hasta el final. Consiguen que te llegue al alma lo que cuentan sus personajes, que lo sientas, y que cuando salgas sigas pensando en ello.

Así que les invito a celebrar los 10 años, pero, sobre todo, les invito a ver esta gran microobra, que estará desde hoy hasta el 18 de octubre. Tienen 6 pases diarios así que no digan que no tienen tiempo. Si me dejan aconsejarles, yo no me la perdería 


sábado, 5 de septiembre de 2020

DE REBROTES Y CULTURA

Hoy quiero hablar de los rebrotes y la cultura.

Es obvio que tenemos que acabar con la extensión del coronavirus en España, es obvio que tenemos que hacer todo lo que podamos para conseguirlo. Pero, también es obvio, que se deben de atajar en aquellos lugares que han sido motivo de los brotes.

¿Por qué digo esto? Porque hay lugares donde una de las cosas que se han anulado han sido los conciertos, las obras de teatro...la cultura en general.

Y ningún brote de coronavirus procede de estos lugares, pero al anularlos trasladan un miedo a los espectadores que no es justo, que, poco a poco puede hundir este sector, que siempre necesita ayuda, pero que ahora la necesita más que nunca.

Así que por favor recordad siempre:

LA CULTURA ES SEGURA, DISFRÚTALA CON RESPONSABILIDAD

sábado, 25 de julio de 2020

DE LLÉVAME HASTA EL CIELO

En este tiempo de nuevas normalidades, me gusta decir que me he reencontrado con viejas costumbres, ir al teatro.

El teatro Galileo abre sus puertas, al aire libre, el veraniego cielo de Madrid es un espectador más, para presentarnos la obra "Llévame hasta el cielo" escrita por Nacho Llorente.

La historia que se nos cuenta, no diré mucho, es la siguiente: Marcelo no tiene nada, se siente engañado, frustrado, sin nada por lo que seguir adelante, así que va a cometer un crimen, matará a su mujer, a su amigo y luego saltará al vacío. Pero en el ascensor, que le lleva a ese ático, se encuentra con Ángela, una mujer algo extraña, y el ascensor se estropea...hasta aquí puedo contar



Juan Carlos Rubio dirige este montaje y logra lo que el autor seguramente pensó, que fuese un entretenimiento, una obra con la que disfrutar mucho, pero tampoco te haga pensar demasiado, es perfecta para una noche de verano.

Luis Mottola consigue que veas en él ese personaje desencantado, esa persona que no tiene nada por lo que vivir, pero que logra replantearse la vida.

A Lolita lo primero es darle las gracias por atreverse a esta aventura. No por la obra, sino por el momento. Y el público, lo agradece llenando el Galileo.
Su interpretación, es pura fuerza, se le ve disfrutar, ella es el personaje, podríamos hablar de un ángel como Gary Grant en "La Mujer del Obispo", es emocionante verla sobre el escenario

Les ánimo a ir, estará hasta el 30 de agosto, si de verdad quieren disfrutar del teatro en las noches de Madrid. Y recuerden, el teatro es seguro pero sobre todo, necesario

viernes, 17 de julio de 2020

DE EMILIA GARRIDO LEMUS autoentrevista

Hoy voy hablar con Emilia, la autora de este blog ¿Qué puedo decir de mi entrevistada? que la conozco de toda la vida, y aún así me sorprende en ocasiones, cuando decidió crear este blog lo hizo, no me esperaba que tuviera el valor.

Ella forma parte de este mundo, del que le hubiera encantado ser parte más activa, como espectadora y, en ocasiones, como persona que da su opinión sobre un montaje (no me gusta la palabra crítico)

Así que sin más preámbulo empecemos

P: ¿Cómo empezó a formar parte el teatro en su vida?
R: Pues de una forma curiosa. Por motivos médicos tuve que venir a Madrid a pasar unos meses con mi tía, tendría unos 10 años. La pobre hacía de todo para que no echará de menos a mis hermanos y padres. Ella ama tanto o más que yo el teatro y una tarde me llevó.
Fui quejándome todo el camino, no quería ir, y afortunadamente no me hizo caso. Allí empezó todo

P: ¿Qué obra fue la primera?
R: La zapatera prodigiosa de Federico García Lorca. Y el primer actor que vi sobre un escenario fue Fernando Delgado

P:¿Qué le dijo a su tía cuando salieron de la función?
R:No lo recuerdo, pero todas las semanas me llevaba a ver una, así que debió ser algo como "increíble"
Lo que sí recuerdo es lo que sentí, cuando apagaron las luces me quedé sola y lo que sucedía en escena era sólo para mí. Esa sensación la sigo teniendo.
Pienso que cada espectador la tiene y cada uno vive ese momento como único.

P: ¿Una vez que lo descubrió, qué es el teatro para usted?
R: Un refugio donde acudir, donde disfrutar de mi momento. Tenga los problemas que tenga el teatro siempre está para ayudarme a olvidarlos, por lo menos un ratito.
Mi vida sería muy diferente sin este amor al teatro, no sé cuál sería pero diferente y posiblemente un poco más triste.

P: ¿Qué cambios ha notado en el teatro durante tantos años?
R: Pues han existido épocas, modas.
En mis inicios el teatro era clásico en su concepción, en sus montajes...a medida que pasaba el tiempo los medios técnicos mejoraban lo que llevó a montajes vanguardistas, no siempre buenos. Actualmente pienso que son más libres, que cada director monta las obras como las concibe o necesita, teniendo en cuenta hacía el público al que quiere dirigirse, no las modas.

P: ¿Qué obra es la que más le ha marcado?
R: Bueno, está pregunta es difícil porque de todos los montajes quiero llevarme algo, aunque no me guste siempre hay esa cosa que se va conmigo.
Puedo decir que las obras de Buero Vallejo han sido muy importantes, y he visto muchas.



P: ¿Qué obra fue la última que vió antes de todo lo que hemos sufrido?
Pues fue el preestreno de Antoine en San Sebastián de los Reyes.
Una obra de gran sensibilidad que habla de la vida del autor del Principito.
Espero que pronto continúe su gira, está y todas las obras que se han quedado paradas.
Se que ya se están poniendo en marcha, que el festival de Mérida se va a celebrar...así que vamos hacia adelante.

P: ¿Quiere añadir algo?
R: Si, que por favor acudan al teatro cuando tengan oportunidad. Es una sensación mágica. Y si no les gusta a la primera, no se rindan continúen porque su magia les llegará.

P: Aunque no tiene nada que ver con el teatro, conocemos su amor por los animales. Qué diría a los que los abandonan, en esta época del año y siempre
R: Pues que el amor no se abandona y que si lo hacen es porque nunca existió. Y si nunca existió mejor no lo tengas, porque un animal (sea el que sea) sólo sabe dar amor.
Abandonar un ser vivo es una de las vilezas más grande que un ser humano puede cometer.

Muchas gracias Emilia, esperamos poder seguir leyendo tu blog. 


miércoles, 20 de mayo de 2020

DE MÁS ANÉCDOTAS

 
Perdonen que no haya escrito nada, en estos días de confinamiento, pero el trabajo (te ocupa más tiempo en casa que en la oficina) y alguna cosilla más, no me lo han permitido.

Esperando volver muy pronto a los teatros, les voy a contar dos anécdotas. La primera la cuento porque nos lleva a la segunda, bueno realmente me lleva a muchas. 

Corría el año 1981, lo sé ha pasado mucho tiempo, yo tenía 9 años, y mi tía Catalina me llevó a ver "La venganza de don Mendo" la interpretaba Manolo Gómez Bur. Era de las primeras obras a las que iba, y si ahora para mí es mágico, con 9 años era fastinante. Creo, que el teatro era el actual Fernando Fernan Gómez, el antes llamado Centro Cultural de la Villa. Cuando su fuente era ruidosa por fuera, y silenciosa cuando entrabas.

Juanjo Menéndez


Esperando el comienzo de la función veo a Juanjo Menéndez. Yo flipe, no hay mejor descripción, y se lo dije a mi tía. Ella me contestó, "acércate y pídele un autógrafo" yo que no, que me daba vergüenza, y ella, sin tener en cuenta mi pudor, me plantó delante y me dijo "venga pídeselo" 

Sinceramente, no sé si se lo pedí o sólo le extendí el programa, el me sonrió, me firmó, y me dijo "pídeselo a quién veas en el escenario, te lo agradecerán por el cariño y respeto" 

Pues, desde ese momento, durante algunos años en el que aún fui niña, lo hice siempre que pude. 

Lo que voy a contar a continuación, creo que estará un pelín descafeinado. Verán, no quiero dar el nombre de una de las actrices, por lo que tampoco diré la obra. Pero aún así la pueden disfrutar. 

Acabada la obra, la primera función, pregunto si, por favor, me podían firmar un autógrafo. Entendía perfectamente una negativa, les quedaba otra función y, a veces, que te den la lata es lo que menos te apetece. Pero me dijeron que si. 

El acomodador me acompañó a un camerino. Dentro me encuentro a Margot Cottens, con otra actriz que era la protagonista, la del gran nombre. Ésta estaba pelando una naranja y me miró con aire de suficiencia. Reconozco que me molestó, me preguntó que si lo que quería era una autógrafo, pero lo hizo de forma forzada, de gran diva que resultó molesto. Yo no entendía su actitud, si había pasado, era porque habían dado ellas el permiso. 

Matgot Cottens


Margot Cottens, lo observaba todo en silencio, de manera discreta y, posiblemente, pensando que a ella no se lo iba a pedir. Así que, y me sorprende aún lo que hice, directamente me dirigí a ella "señora Cottens ¿me puede firmar un autógrafo? "Ignoré a la otra actriz. Se, que quizás, no estuvo bien, pero me había sentado mal su actitud. Me arrepentí según lo dije. 

Ella se quedó parada y me lo firmó, me miró y me guiño un ojo, como si me leyera la mente le paso el programa a la otra actriz para que lo firmará. Y, para mi sorpresa, lo hizo. 

Le di las gracias a las dos, un poco avergonzada, y me marché. Escuché a lo lejos como Margot le tomaba el pelo. 

Todo esto, que sirva para pedirles que cuando podamos, y esperemos que sea pronto, vayan al teatro. Que disfruten y aplaudan como si no hubiera un mañana. Lo de los autógrafos lo dejo a su criterio. 



viernes, 27 de marzo de 2020

DEL DÍA MUNDIAL DEL TEATRO

Hoy es el Día Mundial del Teatro, hoy es un día muy especial para mí.

El teatro como todos sabéis es parte fundamental de mi vida. Repetirlo otra vez no creo que sea necesario.

Hoy lo que quiero decir es algo muy sencillo e importante: gracias

Gracias a todos los que hacen posible la magia que sucede sobre el escenario, son muchos: acomodadores, limpiadores, carpinteros, regidores, actores, productores... E incluso público.



Sigamos defendiendo nuestra cultura que ahora más que nunca necesita nuestro apoyo.

Cuando podamos salir a la calle, les invito a todos a ir a los teatros, a llenarlos de nuevo de risas, aplausos... En definitiva de vida, y agradecerles que su trabajo nos está haciendo la vida más fácil, a través de la televisión, en estos días duros en los que vivimos.

domingo, 1 de marzo de 2020

DE ANTOINE

El 29 de febrero a las 20 horas se ha estrenado, en el Auditorio Adolfo Marsillach de San Sebastían de los Reyes, la obra "Antoine" Estaba allí y he salido encantada, yo y todo un teatro lleno.

Pero ¿qué es "Antoine"? Se estarán preguntando. Para contestar a esta pregunta tenemos que hablar de un libro, que casi todos hemos leído de pequeños, "El Principito" de Antoine Saint-Exupéry. La obra, que quiero compartir en esta entrada, es la vida de su autor pero de la mano de su personaje más conocido, de su historia casi autobiográfica.

De "El Principito" siempre se ha dicho que es para niños, pero no es realmente así. En la obra de teatro se repite mucho, porque es la realidad, nos encontramos con un texto para el niño que todos una vez fuimos. Se habla de la vida, de la naturaleza humana y sobre todo de la amistad. Todo esto es "Antoine"

Nos encontramos con una representación llena de sensibilidad y poesía, donde podemos ver lo que Saint-Exupéry nos quiso mostrar en su obra más conocida, pero donde vemos, también, la lucha del autor para ser fiel a lo que siente, para pelear por la libertad de Europa...para ser el mismo, en un mundo en el que le costaba, en ocasiones, encajar.

El escenario, que el escenógrafo Alessio Melini ha creado con gran sobriedad, no hay ningún elemento que distraiga de la historia pero, a la vez, está todo lo necesario para que brille. El centro es el gran planeta del Principito, el que todos recordamos de nuestra lectura, donde se encuentra su flor y sus tres volcanes. Y a la vez es todos y cada uno de los planetas que visita.


La música, fundamental ya que nos encontramos con una obra musical, son melodías que te guían por la historia, que te cuentan los sentimientos, son las que te erizan el alma cuando las escuchas. Son, aunque parezca raro, quienes te hacen ver al Principito que todos leímos.
Los autores son Elefantes, el grupo pop-rock que nos han hecho vibrar con canciones como “Momentos" así que todo lo dicho se explica, nadie puede discutir su sensibilidad para hacer frente a "Antoine". Su director musical es Miguel López. Añado que la música es en directo y por supuesto es el grupo Elefantes.

Quién tiene el timón de la dirección  es Ignasi Vidal, un director joven pero que tiene una gran sensibilidad y amor por todo lo que hace. Es, además, el autor del texto, así que nadie mejor para hacernos sentir esta historia. Su dirección logra que cada momento sea importante, que el espectador no deje de esperar más. Siempre he pensado que, cuando una dirección no se nota es una gran dirección porque ha dejado su impronta en todo el equipo y éste camina seguro.

En la parte técnica no podemos olvidar al ilustrador Txiki López, gracias a sus dibujos viajamos con Antoine en Avión y vamos caminando por su vida. Tampoco al coreógrafo Mariano Botindari o al diseñador de iluminación Felipe Ramos.

No creo que a nadie le extrañe, tras lo explicado, que los dos personajes principales sean el Principito y Antoine.

El primero está interpretado por Shuarma. Sí, de Elefantes, autor de la música. Muchos pensarán que el Principito debería ser casi un niño. Pero no, porque muestra el niño que llevamos todos dentro, y Shuarma da una lección de cómo lograr la candidez de un niño, de cómo ser un adulto con la inocencia que nunca deberíamos perder.

Javier Godino es Antoine, se complementa a la perfección con Shuarma para mostrarnos su parte más poética. Pero también vemos al hombre que ama la aviación por encima de todo, que le apasiona escribir, que quiere luchar en una guerra que le duele (la Segunda Guerra Mundial) ves a Antoine persona, filósofo...

Consuelo, la mujer de Antoine es interpretada por Aida de la Cruz. Logra que veamos a una mujer apasionada, enamorada pero que quiere vivir su vida, una mujer que no se adapta al lugar donde la sociedad quería ver a las mujeres, y hace lo que quiere sin importar el que dirán.

Les acompañan en esta aventura un elenco impresionante que dan vida a multitud de personajes, tanto de su vida como de su imaginación. En ellos vemos a la flor, al zorro, al geógrafo, al rey sin súbditos, al hombre de negocios que cuenta estrellas, a la serpiente... Todos ellos están impresionantes, consiguen emocionar y hacer sonreír al espectador. Este maravilloso elenco está formado por un gran Alberto Vázquez (al que me encantó oír interpretar el tango) Carmen Barrantes, Lorena Calero, Elías Pelayo y Víctor Massan.

No lo he dicho, porque creo no hace falta, pero por si acaso lo remarcaré. Todos cantan de forma magistral e interpretan las melodías con gran sensibilidad.

Para todos los que quieran ver "Antoine" os diré que estará todo el mes de abril en el teatro Calderón. Pero los que no podáis por vivir fuera, estad atentos porque tienen una gran gira que pasa por Tenerife, Valencia, Valladolid, Zaragoza, Bilbao, Cáceres, Mérida, Sevilla... Y seguro que muchos más.

Si pueden vayan, recordarán al niño que todos hemos sido y, ojalá, logren que permanezca muy cerca del corazón.

sábado, 22 de febrero de 2020

DE OSCAR O LA FELICIDAD DE EXISTIR

De nuevo, Graciela, amiga de hace más de treinta años, me ha regalado una entrada de teatro, la obra elegida ha sido "Oscar o la felicidad de existir" de Eric-Emmanuel Schmitt que se representa en la Sala Arapiles.


La historia, contada sin más, resulta triste y dolorosa. Un pequeño de 10 años, sabedor de que le quedan pocos días de vida por la leucemia que padece, decide escribirles cartas a Dios para hablar de lo que necesita y siente, sobre todo de lo que siente.

Pero, el autor no quiere que la pena invada el patio de butacas, y a través de los personajes, interpretados todos por una sola actriz, consigue que sonriamos, e incluso que nos riamos. Lo que Oscar cuenta en su cartas, es, un canto a la vida, a la esperanza, al coraje de un pequeño que quiere vivir y que gracias a Mama Rosa, la disfruta más, en 14 días, que mucha gente en muchos años.

Y logra ese pequeño milagro sin, casi, salir del hospital, el personaje de Mamá Rosa es fundamental en el caminar de Oscar. Una voluntaria que le ayuda a entender lo que le sucede, entender a sus padres y le enseña a escribir a Dios para desahogarse. 


El director Juan Carlos Pérez de la Fuente, realiza una dirección magistral. Todos los espacio son parte de un hospital, el escenario se hace pequeño y cercano, gracias a su dirección. La escenografía es sencilla, pero natural, unas cajas de madera representan las habitaciones, dos pantallas laterales, las dos veces que Oscar sale del hospital y, la base principal de todo el decorado, los números que representan las cartas, en rosa sobre paneles de madera. 

Finalmente hablaré de Oscar, de Mamá Rosa, de Einstein... de todos los personajes, ya que son interpretados por una sola mujer: Mona Martínez.

Que decir de ella, empezaré diciendo  que su interpretación es la emoción, el amor, la alegría, los sentimientos que requieren todos los personajes.  Seguiré diciendo que durante toda la obra da una lección de interpretación, que traspasa al patio de butacas toda su fuerza. Existen momentos de gran emoción y los controla sin llegar a la sensiblería, lo que los hace más impactantes. Recibe un gran aplauso, un merecidísimo aplauso.

"Oscar o la felicidad de existir" te toca el corazón. Cuando sales de verla lo que piensas es, en disfrutar cada día sin mirar lo que pase mañana. 

sábado, 15 de febrero de 2020

DE LA FUNCIÓN QUE SALE MAL

Cuando, hace relativamente poco, cumplí años, no hace falta decir cuantos, mis amigos perreros y gateros me regalaron una entrada de teatro. Días antes, me habían sonsacado preguntándome por la obra que podiamos ir a ver. No lo dude mucho y les contesté "La función que sale mal" y hoy hemos ido.

No pienso contar nada, referente al argumento, no pienso destripar nada, porque el espectáculo comienza según entras en el teatro La Latina. Sí diré, únicamente, que lo que ocurre sobre el escenario es una representación amateur de una función llamada "Asesinato en la mansión Haversham” (según sus propias palabras)

Lo que los autores,  Henry Lewis, Jonathan Sayer y Henry Shields, buscan, es la carcajada desde el minuto uno. Pero no de forma irónica, sino de forma física, tangible. Con eso, no quiero decir que el humor que nos muestran sea de segunda, todo lo contrario, lo que los actores logran controlar en el escenario es impresionante.



Me explico, cada milímetro del escenario (que es otro personaje más) es controlado por ellos, cada mueble es utilizado de forma perfecta, sus cuerpos se acoplan a la situación requerida de forma robótica... Están inconmensurables.

Por supuesto el Director, David Ottone tiene mucha culpa, pero el escenógrafo Nigel Hook me parece maravilloso.

Los actores, ya lo he dicho, se pelean "con su mala suerte" de forma magnífica. No me gustaría destacar a ninguno por encima de otro, porque todos se necesitan. Lo que si voy hacer es nombrarlos a todos:

Chris: Hector Carballo
Robert: Carlos de Austria
Sandra: Carla Postigo
Dennis: Alejandro Vera
Annie: Noelia Marlo
Trevor: César Camino
Max: David Ávila
Jonathan: Felipe Ansola
Swing: Paula G. Lara, Ángel Saavedra y Avelino Piedad

En resumen, si quieren pasar un par de horas de diversión, si quieren llevar a algun niño o niña para que comiencen amar el teatro, si quieren que una "función salga mal" de una forma perfecta, caminen, disfrutando de un gran barrio, hacia la La Latina y les garantizo que el paseo de vuelta lo harán con una sonrisa.

sábado, 1 de febrero de 2020

DE CECILIA VALDÉS

Escribir la crítica de la Zarzuela "Cecilia Vadés" es fácil si cuando sales de disfrutarla, escuchas al público asistente: “maravillosa" "¡qué música más bonita!" "lo hacen todo bien"

El Teatro de la Zarzuela nos presenta una pieza musical que demuestra lo importante que es nuestro Género Chico más allá del charco, y lo hace de forma admirable.

La historia que se cuenta, es parte de la literatura cubana, el compositor Gonzalo Roig le dió la vida musical, larga y próspera vida como hemos visto hoy.


El director Carlos Warner nos lleva, el espectador no tiene que hacer ningún esfuerzo, a una plantación cubana. La atmósfera que se consigue crear con la luz, con los bailes... Es mágica en ocasiones y agobiante en otras. Nos dirije, perfectamente, donde la historia necesita.

Seguramente se pregunten que es lo que cuenta esta Zarzuela. El amor y desamor les diré, los celos y la maldad humana, la falta de sentimientos que, en ocasiones, hace que no veamos a nuestros semejantes como lo que son: seres humanos que necesitan amor y respeto. Para conocer más les invito a que vayan.

Sí, hay algo que enamora de la Zarzuela, es su música y puedo decir que "Cecilia Valdés" no es una excepción. La composición de Gonzalo Roig, es una mezcla perfecta de la Zarzuela clásica con los ritmos de Cuba. La Orquesta de la Comunidad de Madrid, con Óliver Díaz en la dirección, junto a los intérpretes que están en el escenario, crean momentos de auténtico despertar de todos los sentidos. Por ejemplo, cuando José Dolores, interpretado por Homero Pérez-Miranda, canta su amor no correspondido a Cecilia Vadés.

La coreografía, de Nuria Castejón, es otro punto fuerte que logra la magia que todos vemos sobre el escenario.

Todos los actores están perfectos, maravillosamente dirigidos, sus voces llenan el patio de butacas y, cada melodía hace que te acerques más a ellos, a su historia, que la vivas envueltos en su voz.

Hay interpretes como, un maravilloso Alberto Vázquez, o una perfecta Isabel Cámara, que actúan sin intervenir en su parte lírica, pero que fastinan de la misma forma.

Todos se han llevado mi aplauso, el aplauso de un teatro lleno.

No queda mucho tiempo para disfrutarla, así que, todos al Teatro de la Zarzuela antes del 9 de febrero, todos a disfrutar de esta gran aventura.

sábado, 4 de enero de 2020

DE UNA DECLARACIÓN DE INTENCIONES

Hablando con una compañera de trabajo, al que le encanta el teatro, le comenté que yo, cuando era joven y animada por mi tía, pedía autográfos después de ver las obras (prometo contar algunas historias curiosas sobre esto), le conté una anécdota sobre Margot Cottens. Hasta aquí una conversación normal, pero cuando me miró y me preguntó quién era Margot Cottens, que no le sonaba... me quedé bastante triste y preocupada.

Si una persona como ella, que ama el teatro, no conoce a actores y actrices que han pisado las tablas, aunque épocas diferentes, quizás éstos sean olvidados y no me gustaría que eso pasase.


Es cierto que, junto a mi amor por el teatro, siempre ha existido una curiosidad por el cine español de todas las épocas, y aquí, he podido conocer a muchos de estos profesionales, que de otra forma no me hubiera sido posible.

Estudio 1 ha sido, también, una buena forma de conocerlos y conocerlas. Ha sido la manera que me ha llevado a admirar a muchos de ellos.

Afortunadamente a alguno o alguna he podido verlo o verla sobre el escenario, pero a menos de los que hubiera querido.

La intención de esta entrada era recordar sus nombres, pero no lo voy hacer. Lo que si haré será anunciaros que una vez al mes, como mínimo, haré un homenaje a un actor o actriz que no hemos conocido, porque se lo merecen y porque quiero.

Espero que mi declaración de intenciones os guste, y si queréis dejarme nombres os lo agradeceré mucho, así no nos olvidaremos de nadie.