Los que me leéis, ya conocéis mi debilidad por Antonio Casal, tengo una entrada dedicada a él. Y aunque nunca pude verlo trabajar en directo me cautivó su forma de hacerlo.
Así que el primer recuerdo que tengo de nuestra entrevistada, fue viéndola presentar "Aplauso", un programa músical, yo tenía unos 10 años, y fue mirarla y recordarme a alguien, pregunté a mi madre quien era: María Casal me contestó. Entonces entendí porque me era familiar. Fue nuestro primer contacto.
Posteriormente la he visto en series como "Menudo es mi padre" u "Hospital Central" y más recientemente como Reyes en "La que se avecina"
Pero centrémonos en mi pasión, a medida que fue creciendo mi amor por el teatro, creció mi admiración por María. Me encontré con una actriz maravillosa, e investigando me enteré que además dirigía, y para añadir más a mi admiración, era una escritora teatral de éxito. Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que nos encontramos ante una persona del Renacimiento, una mujer amante de su trabajo.
Además, y quizás lo más importante, he descubierto a una persona maravillosa, gracias María por contestarme a estas preguntas.
P:Tu padre, era Antonio Casal, un magnifico actor, ¿En qué te ha influido en tu trabajo?
R: En la práctica no mucho. Cuando mi padre murió yo tenía quince años y ni siquiera sabía a qué quería dedicarme. Ahora, por algunos comentarios que me hacen, hay compañeros que me reprochan que he tenido algunas ventajas a la hora de convertirme en actriz, es decir, un apellido conocido. No puedo negar que es verdad. Pero quiero pensar que aparte del nombre también he heredado otras cualidades de mi padre. La genética tiene su peso en estos asuntos, me parezco mucho a él en lo no tan bueno, así que espero haber heredado algo de lo bueno. Es una suerte que mi padre tuviera talento, fotogenia, profesionalidad… ahí lo dejo.
P: Estuviste trabajando como actriz fuera de España, Estados Unidos,
¿Qué aprendiste allí?
R: Aprendí a conocerme a mi misma como persona. Fue una
época muy dura, con mucha soledad y mucha lucha, pero también muy bonita. Me
gustan mucho los actores americanos, creo que tienen un gran nivel. Y allí tan
difícil o más que aquí trabajar como actor. Pero sin duda, creo que están muy
preparados, así como los británicos. La calidad superior de sus series,
películas y obras de teatro es innegable. También he trabajado en Centro y
Sudamérica así como en Europa.
P: Además de una actriz estupenda, una gran directora, escribes
obras de teatro, como por ejemplo "Te he dejado un pollo en el horno"
con la que estás de gira, "Lobas" sería otro ejemplo ¿Quien nació
antes, la actriz o la autora?
R: Gracias, gracias (me pongo colorada). La verdad
es que siempre he escrito, desde joven. Tengo unas cuantas cajas llenas de
ideas para guiones y obras de teatro. Quiero decir a mí escribir me ha salvado
la vida. En esa época de tu vida en la que deberías estar recogiendo los frutos
de tu carrera, a las actrices nos invisibilizan (¿palabra nueva?). Yo me negué
a hacer sólo personajes abatidos, tristes, amargados, cornudos y fracasados… y
por supuesto, breves. Y me sigo negando, por eso escribo. Porque no es verdad
que las mujeres no tengamos opinión, vida plena, sentido del humor e incluso
caprichos que satisfacer. Puedo decir que como autora estoy teniendo una
respuesta que no esperaba, y haciendo los mejores personajes de mi vida. Y
encima escritos por mí.
P: Tocas todos los palos ¿Con cuál te quedarías? ¿Con cuál es con el que más disfrutas?
R: Me
gusta todo aunque creo que donde mejor me lo paso es en televisión. Ahora estoy
participando en la segunda temporada de la serie “Vergüenza” de Movistar, un
lujo. Tampoco pudo contarte nada de ello, ya sabes, por no destripar. Nunca
había trabajado con dos directores a la vez y es una experiencia muy
enriquecedora. Me gusta trabajar en
equipo y cuanto mas grande, mejor. Tener a tu lado grandes directores y
estupendos actores, maquillaje, estuario, equipo de cámara… todos te enseñan,
creces mucho. Escribir me gusta también, pero es una actividad muy solitaria. Aunque debo reconocer que es impagable cuando
un actor dice algo que has escrito tú y la gente se ríe o se conmueve con ello.
A la vez conlleva mucha responsabilidad. El autor es la fuerza motriz de todo
proyecto. El primer y último culpable de todo.
P: Tú escribes para personajes femeninos, ¿crees que se debería
escribir pensando más en las actrices?
¿Ves una tendencia a ir cambiando la situación?
R: Sólo en “Lobas” había un
personaje masculino, lo interpretaba Mario Sánchez, gran actor. Ahora estoy
terminando una obra para una mujer de mi edad y un chico de treinta que haría
de su hijo. Perdona si no doy más detalles. También estoy a la mitad de otra
obra para tres actrices de mi edad, es también comedia. Creo que hay un gigante
desatendido que es el público femenino de todas las edades y en particular para
espectadoras a partir de los cuarenta. En el extranjero ya se han dado cuenta
de que la pirámide demográfica ha cambiado y hacen productos para este target.
Hay que escribir para las actrices porque hay espectadoras, y tienen que verse
reflejadas también, tanto en drama como en comedia. Mis compañeras del “Pollo”
Marisol Rolandi y María José del Valle se lucen en el escenario y están
teniendo un éxito artístico y personal en cada plaza que visitamos.
P: El teatro es saltar sin red ¿Crees que todo el mundo está
preparado?
R: Mi opinión es que en el teatro hay que aprender poco a poco, porque
cuando se levanta el telón también estás bastante solo. A diferencia de lo que
se hace para cine y televisión que tienes apoyándote a tu director y luego hay
un montaje. Lo ideal es no hacer un protagonista la primera vez que haces teatro,
en imagen no importa tanto. En las tablas mejor empezar con papeles pequeños e
ir avanzando… y sobre todo, ver mucho teatro. Viendo se aprende mucho.
P: En mi opinión la comedia es más difícil que el drama ¿En
cuál de los dos estás más cómoda?
R: El drama se puede aprender, la comedia no.
Para ser buen actor de comedia, en mi opinión, hace falta algo con lo que se
nace. Las pausas, el ritmo, el tono, el gesto… Hay quien nace con ello y hay
quien no. Me parece que la mayoría de actores cómicos son capaces de hacer
drama, no es así al contrario, hay grandes actores dramáticos que no están
dotados para la comedia. A mí me gusta hacer reír. Tanto en “Tre-mendas” como
en “Te he dejado un pollo en el horno” tengo dos momentos que son más de clown
que de actriz cómica. Me impone mucho hacerlos, da mucho miedo, y además son
muy físicos… pero en cuanto escucho las primeras risas, me relajo y disfruto
con ellos, con el público.
P: Aunque no tenga que ver con el teatro, se que eres amante de
los animales, comienza el verano, ¿qué dirías a todos los que abandonan a los
animales?
R:La verdad, es algo incomprensible. Puedo entender que no puedas
cuidar de tu mascota por algún motivo, tienes que solucionarlo y no siempre es
lo mejor para el animal. Yo creo que los perros tienen un único amor, su amo. Y
no les importa si tienen mas espacio o mejor comida, lo importante eres tú para
ellos. Lo que no comprendo es que quieras a tu animal por estaciones. Sólo
ponte en el lugar de tu mascota y lo entenderás.
Si quieres añadir algo más, somos todo oídos. Sólo darte las
gracias. Por apoyar el teatro y a las personas que lo hacemos y felicitarte por
lo bien que escribes.
Ahora la que se pone colorada soy yo, de nuevo gracias María por tu amabilidad y cariño.
Y a todos deciros que "Te he dejado un pollo en el horno" está de gira, que cuando llegue a vuestras ciudades tenéis que verla, que no podéis perderos la oportunidad de ver a estas tres actrices sobre un escenario, que el teatro siempre es bonito pero el buen teatro aun más. Así que ha disfrutar mucho, os aseguro que saldréis pensando en repetir de nuevo, os doy mi palabra de honor porque a mi me pasó.
Y a todos deciros que "Te he dejado un pollo en el horno" está de gira, que cuando llegue a vuestras ciudades tenéis que verla, que no podéis perderos la oportunidad de ver a estas tres actrices sobre un escenario, que el teatro siempre es bonito pero el buen teatro aun más. Así que ha disfrutar mucho, os aseguro que saldréis pensando en repetir de nuevo, os doy mi palabra de honor porque a mi me pasó.