sábado, 25 de marzo de 2023

DE LA GUERRA DE NUESTROS ANTEPASADOS

Cuándo se habla del libro "La guerra de nuestros antepasados" de Miguel Delibes, hay que añadir: de obligada y maravillosa lectura.

Cuándo se habla de la obra de teatro "La guerra de nuestros antepasados" basada en el libro, que está en el Bella Artes, hay que añadir: de obligada y maravillosa visión.

Delibes nos regala un texto antibelicista, en el que vemos cómo un alma sensible y buena, la de Pacífico Pérez, es machacada por su Bisa, Abu y Padre. Nos habla principalmente de odio, odio que es el motor de la guerra. La necesidad de ser un hombre a través de ese odio, y si no lo tienes no eres nada. Pacífico no es nadie hasta que no comete un crimen atroz, ahí comienza a ser un hombre para sus antepasados. En realidad, es un hombre destruido por su familia por no sentir el odio, por intentar ser diferente.

La adaptación de Eduardo Galán es auténtica, respeta el espíritu y, sobre todo, ese lenguaje que es tan importante para poder entender la vida de Pacífico.

La escenografía de Mónica Boromello es sencillamente perfecta, adecuada. El menos es más de una forma mágica.

La dirección de Claudio Tolcachir es tan cuidada en todo, que es difícil ponerle un pero. Está atento a todos los detalles, y principalmente a las interpretaciones, de tal forma que las convierte en oro puro.

En cuanto a Carmelo Gómez y Miguel Hermoso, lo primero que tengo que decir es que hacía tiempo que no veía esa generosidad, que tienen entre ellos, sobre un escenario.

Carmelo Gómez es Pacífico Pérez desde el minuto cero, la sensibilidad la muestra sin necesidad de hablar, el personaje no lo hace suyo, él es el Pacífico. Magistral, totalmente magistral.

Miguel Hermoso, el Doctor, le responde de forma tan maravillosa, tan perfecta que no ves dos actores, no ves dos personajes, ves a dos personas que quieren hacerte entender quién es y porque es así Pacífico Pérez. Es tan bonito verle que te llega al alma.

Así que, si pueden conseguir entradas, porque están con todo vendido todos los días, no se la pierdan. Los que amamos el teatro debemos verla.